Te despiertas con un beso de buenos días de tu pareja. Te vistes y te dispones a desayunar con sus seres queridos. Preparas todo y marchas de camino al coche dispuesto a afrontar un nuevo día. Tu vida está repleta de sueños, objetivos, viajes, amistades. Arrancas el coche y te pones camino al trabajo. Estás a 5 minutos de llegar a tu destino, y de repente escuchas un gran sonido seguido de un enorme impacto. Todo se vuelve oscuro...
La invención del automóvil data sobre el siglo XVIII, aunque no fue hasta 1885 que Carl Benz y Gottlieb Daimler crearon el primer vehículo funcional propulsado con gasolina. El primer accidente automovilístico tardó solo 13 años en ocurrir, cuando un hombre llamado Henry Lindfield chocó frontalmente contra un árbol, muriendo horas más tarde.
Algo tan simple y rutinario como coger un coche, es posiblemente de las cosas, sino la más, peligrosas que realizamos durante nuestro día a día sin darnos cuenta. Los accidentes de tráfico tan solo en España, en el año 2019 fueron el causante de la pérdida de 1755 vidas y de miles más de heridos según los datos oficiales de la DGT. Esto nos deja con millares de niños huérfanos, padres sin sus hijos, amigos sin sus amigos...
Más impactantes son los datos mundiales, siendo alrededor de 1350000 las personas fallecidas en accidentes de tránsito al año. Esto nos deja con 3700 de muertes tan solo por día. Estos datos hacen que dichos accidentes ocupen el puesto séptimo como forma de muerte más común en países con ingresos más bajos, y una de las causas de muertes más común alrededor del globo. Estadísticas que difieren mucho de otros medios de transporte que solemos considerar más peligrosos, como los aviones. En el año 2019 tan solo 5 fueron los aviones que sufrieron un accidente mortal.
La mejor forma de prevenir estos accidentes es educar y prevenir. La mayoría de accidentes se producen por un fallo humano, que tanto puede ser involuntario, como producto de una conducta temeraria. El alcohol y las drogas son los responsables de la gran mayoría de delitos al volante, más de un 60% del total. El exceso de confianza hace que tomemos más riesgos de los necesarios, por ello el exceso de velocidad, los despistes o el teléfono móvil también son unas de las causas más comunes de accidentes, aunque muchas veces son derivados del consumo citado anteriormente.
Como la mayoría de los accidentes se producen por el consumo de alguna sustancia, deberíamos conocer sus efectos al volantes antes de tomar una decisión precipitada. En el caso del consumo de alcohol, más allá de superar o no la tasa de alcoholemia, que además es variable dependiendo del país en el que te encuentres, sus principales efectos son disminución en la concentración, sueño, movimientos lentos, disminución del campo de visión, entre tantos y tantos más. En el caso de las drogas, sus efectos varían mucho dependiendo de la sustancia administrada, las más comunes son la marihuana, cocaína o anfetaminas, produciendo diversas alteraciones como desorientación, exceso de confianza o visión borrosa.
Marihuana Fuente pixabay |
A la hora de ponernos al volante, no solo debemos pensar en nosotros como conductores, sino que debemos tener en cuenta a miles de personas más en nuestra situación. Por ello, al igual que nosotros deseamos una conducción segura, ellos quieren lo mismo. Antes de coger un vehículo, siempre pensad tanto en nuestra seguridad como en la de los demás, ya que por decisiones precipitadas y temerarias, podemos no tan solo destrozar la vida de una persona, sino la de los que más quiere o incluso la nuestra.
Nos vemos en el siguiente artículo...
Hola compañero!!
ResponderEliminarCreo que tu entrada es digna de que la lea todo el mundo. No somos conscientes del peligro hasta que nos topamos con alguna desgracia y que irónico que tenga que pasar algo para ver las consecuencias que eso conlleva. Ojalá todxs tuviésemos conciencia de esto.
Gracias por dar visibilidad a un tema tan importante como este.
Un saludo compañero :)
Hola Ana,
EliminarEn primer lugar, muchas gracias por tus palabras. Es totalmente cierto que muchas veces subestimamos acciones cotidianas, que en verdad son más complejas de lo que pensamos. Por ello es necesario que tomemos conciencia.
Un saludo compañera.